Andreas Kalcker es un investigador, que de forma circunstancial descubrió la bondad de esta sustancia que lo curo de la malaria, hace 12 años; aclara en la siguiente entrevista, que el Dióxido de Cloro nada tiene que ver con la lejía u otros productos similares, como se esta tratando de confundir. La controversia no tiene una base concreta, no hay un solo caso probado acerca del daño que podría causar o que haya causado el beberla diluida en agua, bajo estrictas cantidades, mas bien existen innumerables casos comprobados de personas sanadas,incluyendo a médicos y enfermeras.
Kalcker no busca rentabilizar su descubrimiento, tampoco negociar las patentes, sino mas bien ponerlo al servicio de la humanidad, y que las personas puedan tener acceso de forma gratuita y libre a esta sustancia. Escuchenlo