España: Abren puertas a turistas y a posibles contagios

Marina Velasco

La nueva normalidad empieza a parecerse bastante a la vieja. Encontrar sitio en una terraza vuelve a ser deporte de riesgo, las playas cuelgan el cartel de ‘aforo completo’ y el turismo avanza en su desescalada.

Sólo el 21 de junio, el primer día sin estado de alarma, los aeropuertos españoles recibieron cien vuelos europeos. Ese domingo España abrió sus fronteras a todos los países del espacio Schengen y a Reino Unido, cuyos ciudadanos no tendrán que realizar finalmente la cuarentena de dos semanas. Sólo se queda fuera Portugal, que deberá esperar hasta el 1 de julio, cuando la Unión Europea abre también sus fronteras externas.

Desde el pasado lunes, todos los viajeros que lleguen a cualquier puerto o aeropuerto español se someten a tres controles por parte de las autoridades sanitarias: toma de temperatura, una observación visual sobre su aparente estado de salud y un registro de sus datos de localización. Si el viajero no supera satisfactoriamente alguno de estos tres requisitos, es examinado por un médico y, en función de su diagnóstico, derivado a los sistemas asistenciales de la comunidad autónoma que corresponda para ponerle en cuarentena si es necesario.

Llegada de los primeros turistas alemanes a Palma de Mallorca

Para estos controles, se ha reforzado el personal de Sanidad Exterior —compuesto por unas 600 personas— con un centenar de profesionales que habitualmente ya prestan servicio en aeropuertos y que se irá incrementado en función de las necesidades. No obstante, cabe preguntarse si todo esto será suficiente, teniendo en cuenta que los aeropuertos fueron grandes difusores del virus en la primera ola de la pandemia (todavía muy activa), y que ni España ni el resto de Europa están libres de casos.

«El turismo seguro no existe. El único turismo seguro es el que no se produce» Javier Padilla

Expertos consultados no ocultan sus dudas. “El turismo seguro no existe. El único turismo seguro es el que no se produce”, responde tajante Javier Padilla, médico de atención primaria y autor de Epidemiocracia (Capitán Swing), cuando se le pregunta por el tema. “Cuando hay más gente, hay más probabilidad de que haya casos, y cualquier situación que aumente las posibilidades de transmisión tiene que centrar nuestra atención”, asegura Ildefonso Hernández, catedrático de Salud Pública y portavoz de la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (SESPAS).

Conscientes de que la opción de mantener el país cerrado al turismo —un sector que aporta el 12% del PIB— no estaba sobre la mesa, ambos han sopesado los riesgos, han calculado los pros y los contras… y su conclusión es que las medidas de prevención podrían no ser suficientes.

En primer lugar, conviene distinguir entre turistas procedentes de países con una situación epidemiológica similar a la española, como Alemania, Francia e Italia, y de países más rezagados en el control de la epidemia, como Reino Unido y Suecia. El riesgo que plantean los primeros no debería ser mayor que el que supondría la llegada de madrileños a la costa levantina, por ejemplo.

“Con su llegada, no es que aumente la frecuencia de infección o la tasa relativa, ya que vienen de zonas con una baja incidencia epidemiológica; simplemente, aumenta la cantidad de población susceptible a infectarse, y la probabilidad de que crezcan los casos en números absolutos”, explica Hernández. “Probablemente seguimos a 6, 8 o 10 casos por 100.000 habitantes, que está bien, pero si doblas la población, los casos absolutos serán más, y los servicios de atención primaria y epidemiología tendrán más carga, así que cada comunidad debe saber si puede hacer frente a ello”, señala.

«Si en el peor de los casos las comunidades antes calculaban que podían enfrentarse a 20 casos al día, ahora deben contar con que la cifra puede ser el doble» Ildefonso Hernández

“En Baleares y en Canarias, donde han manejado bastante bien la epidemia, tienen que calcular que si duplican su población, o si aumenta en un 50%, deben estar preparados para afrontar cualquier contingencia que surja. Si en el peor de los casos antes calculaban que podían enfrentarse a 20 casos al día en términos absolutos, ahora deben contar con que la cifra puede ser el doble. La cuestión es si lo pueden manejar o no”, apunta el epidemiólogo.

Británicos y suecos vienen de una situación peor

España recibió el año pasado 83,7 millones de visitantes, la mayoría de ellos procedentes de Reino Unido (18,1 millones), Alemania (11,2 millones) y Francia (11,1). “El país de donde más turistas vamos a recibir es Reino Unido, que todavía sigue registrando 1.200 contagios diarios y tiene menor capacidad de control que España”, alerta Javier Padilla, que se muestra escéptico co medidas como la toma de temperatura en los aeropuertos. “Hay muy poca evidencia sobre su efectividad”, afirma.

Para Ildefonso Hernández, Reino Unido no es siquiera el país más ‘problemático’, sino Suecia. “En Suecia, la tasa de incidencia de los últimos 14 días es de 150 casos por 100.000 habitantes, una cifra bastante alta y más de diez veces superior a la de España”, advierte. Reino Unido, sin llegar a ese dato, sí duplica la tasa de España, que está en alrededor de diez casos por 100.000 habitantes en los últimos 14 días.

A esta ‘desigualdad’ epidemiológica se suma el hecho de que las regiones que suelen acoger más turistas son las que menos incidencia de casos han tenido en España, algo que ahora las vuelve más vulnerables.

Madrid deja de ser epicentro

“En comunidades como Baleares o Canarias la inmunidad es muy baja, así que es posible que el foco de la epidemia en España, que hasta ahora ha sido Madrid, se deslocalice a otras regiones”, vaticina Padilla. “No me extrañaría que dentro de un mes estuviéramos hablando de un brote relativamente importante en alguna zona de Mallorca, por ejemplo, y esperemos que tengan la capacidad para controlarlo”, comenta.

Desde mediados de mayo, se ha incrementado notablemente la capacidad de detección y control de brotes, pero, aun así, Sanidad sólo detecta el 20% de los casos de coronavirus que se producen en España, y sólo conoce el origen del 60% de ellos.

Olvídense del número cero

El autor de Epidemiocracia explica por qué se debe desechar la idea de que vamos “hacia un escenario de ‘contagios cero’” similar al que persiguen países como China. “Hemos renunciado a ese escenario porque probablemente no podíamos permitírnoslo. Como no podemos pasar sin el turismo, tenemos que salir del confinamiento, y como tenemos que abrir, hay que conformarse con tener un cúmulo de casos constante que no va a llegar a ser cero hasta que no haya solución definitiva a la pandemia”, afirma Padilla.

“La medida más efectiva para que haya una transmisión ligada al turismo es evitar que haya turismo”, zanja. “Pero si tuviera que elegir una medida para la detección precoz y la ‘reducción de daños’, aunque no sea cien por cien efectiva, diría que la de exigir al viajero una PCR negativa en las 48 horas previas a volar, y que sea en origen, no en destino”, propone. Esto, de momento, ha sido descartado por el Ministerio de Sanidad, que sí hará pruebas PCR en caso de que Sanidad Exterior lo estime necesario tras la evaluación general a la que someterá a todo pasajero.

Para Ildefonso Hernández, la cuestión de las pruebas a viajeros es “complicada”. “Se ha discutido bastante, pero por recomendaciones de la UE no se puede obligar a que los viajeros se hagan una PCR antes de volar”, explica. “La alternativa sería hacer una PCR en destino. El problema es que poner a trabajar a los laboratorios de una provincia, con el presupuesto que eso conlleva, para analizar a los miles de viajeros puede ser insostenible, teniendo en cuenta los pocos casos que van a encontrar”, argumenta. Por otro lado, esto tampoco impediría que esos turistas se pudieran contagiar una vez en España.

Reforzar los sistemas de detección y poner a las empresas en alerta

Si tuviera que proponer una medida para abordar de forma responsable la llegada de turistas, Hernández elegiría “reforzar bien los sistemas de detección y tener una capacidad de reacción muy alta para atajar la infección desde el principio”; esto es, contratar a más personal. “No sólo hay que tener la atención primaria y la epidemiología a punto, sino recordar a las empresas que cumplan las medidas de seguridad y prevención, que reporten cualquier alerta”, pide el portavoz de SESPAS.

A Javier Padilla también le preocupan “los trabajadores del sector turístico que están de cara al público”. “Son quienes estarán más expuestos, así que espero que sus empleadores les doten de las mejores condiciones de seguridad posibles”, comenta.

“Dado que queremos que haya turismo y queremos que sea seguro, conviene no sólo vigilar la situación epidemiológica, sino invertir en vigilar que las empresas también están cumpliendo las normas para evitar que se produzca la infección”, coincide Hernández. “Eso se traduce luego en acciones como que si un turista se acerca a la recepción del hotel a pedir un paracetamol, el recepcionista le pregunta si ha llamado al médico para consultarle su caso”, ilustra el epidemiólogo. Tan simple y tan útil.

 

 

La corrupción genera muertes

Por: Umberto Jara

El médico Oscar Ugarte sigue brindando entrevistas con preguntas complacientes en su intento de distraer y encubrir su gravísima responsabilidad y, como suele ocurrir, en las personas sin escrúpulos está recurriendo a las mentiras, una actitud que agravia aún más a los muertos por falta de oxígeno y a los que, lamentablemente, seguirán falleciendo.

Nos cree tontos. Esta mañana en Canal N varió su posición y admitió ser el único responsable de haber firmado la Resolución Ministerial N° 062-2010/Minsa que elevó de 93% a 99% la exigencia en el grado de pureza del oxígeno. El día anterior había dicho que, cuando firmó esa oprobiosa resolución, se le había pasado revisar el informe técnico y que “quizás detrás de eso había intereses”.

Los intereses existieron y ese fue el origen del negociado y no puede afirmar que no participó porque es mentira que se le pasó un informe técnico. Ese informe “técnico” fue realizado en su propia gestión y está en el expediente Nº 08-116593-001 que corresponde al año 2009. Ugarte asumió el ministerio de Salud el 14 de octubre de 2008. Es falso que se le haya pasado un informe. Si la memoria le falla que haga el siguiente ejercicio: el expediente fue recibido y validado por la abogada Desilú León Chempén, burócrata en varios sectores que trabajó con él y el día de hoy es Secretaria General de la Presidencia del Consejo de Ministros nombrada por el premier Vicente Zeballos y designada, en marzo pasado, gran casualidad, como secretaria técnica de la Comisión Multisectorial de Alto Nivel contra el COVID-19.

El negociado corrupto del oxígeno medicinal

En resumen, detrás de estos cargos de nombres pomposos algo está claro: el negociado del oxígeno medicinal lo originaron el médico Oscar Ugarte y la abogada Desilú León el año 2010, y hoy día forman parte del actual gobierno. Por eso, Ugarte, el ministro de Salud Víctor Zamora y el premier Vicente Zeballos, todos ellos a cargo del tema COVID-19, no solicitan la derogatoria del oligopolio otorgado a las corporaciones Linde y Air Products. Tampoco el presidente de la República toma la iniciativa. ¿Por qué no derogan la norma que beneficia a las dos corporaciones mientras los peruanos se mueren por asfixia? ¿Por qué solamente la han suspendido durante la pandemia en lugar de dejar sin efecto el negocio? Solo hay dos razones y las dos deben ser investigadas y sancionadas: o quieren mantener el negociado que ya lleva 10 años de vigencia, o tienen temor a que las empresas favorecidas filtren información que los ponga frente a una acusación penal.

Alan Garcia juramentando a Oscar Ugarte Ubilluz

Todo bribón ejerce el cinismo y Ugarte, además, lo exhibe ante las cámaras. En la complaciente entrevista de esta mañana en Canal N sostuvo, presumiendo que los ciudadanos somos ignorantes, que “en ese momento la farmacopea americana y la europea no tenían precisión al respecto y que en ese momento no había todavía otros elementos de juicio”. Si seguimos el razonamiento de Ugarte entonces todos los pacientes que usaron oxígeno al 93% antes del año 2010 —cuando él elevó la exigencia a 99%— tendrían que estar muertos o habrían sufrido envenenamiento porque ese es el oxígeno que se usaba en el país. Pero basta preguntar a médicos honrados y capaces para saber que el estándar conocido como Oxygen 93 percent, contiene no menos de 90% ni más de 96% de oxígeno, por tanto, exigir el 99% carece de todo sentido, salvo que se quiera hundir el mercado local para darle un oligopolio a las corporaciones Linde y Air Products, cosa que efectivamente hizo Ugarte y que hoy mantienen Vizcarra, Zamora, Zeballos y Ugarte.

Hay algo mucho peor en la mentira grotesca utilizada por Ugarte. El oxígeno medicinal se usa como tal desde 1,780, es decir, la humanidad entera ha sobrevivido guerras, pandemias, intervenciones quirúrgicas, cuidados intensivos sin necesitar el oxígeno medicinal al 99% y Ugarte viene a decirnos que en el año 2010 “la farmacopea americana y la europea no tenían precisión al respecto”. Es evidente que quien sí tenía precisión para el negociado era Ugarte, quien con esa resolución se trajo abajo la industria del oxígeno, llenó las arcas de dos corporaciones extranjeras y ahora miles de peruanos mueren y otros se angustian por un balón de oxigeno. La situación es criminal porque no se trata de una producción complicada y cada hospital podría producirlo, pues, una pequeña planta de oxígeno puede generar varios litros por minuto, y una de mayor envergadura 120 toneladas por día. No hay razón para que la gente muera por falta de oxígeno.

El escudo del colapso sanitario

El gobierno no puede escudarse en “el colapso sanitario” y sus absurdos seguidores que aplauden la miseria moral, no pueden decir “le pasó a las más grandes potencias”. No. Para nada. No se trata de muertes por Covid-19, se trata de muertes por falta de oxígeno que afecta a todo tipo de pacientes, desde recién nacidos hasta ancianos, y ese oxígeno se podía producir en cantidad y sin problemas.

Usted que lee estas líneas mire el video que está al final. Ocurrió hace unos días. Son bebes recién nacidos en Tarapoto que necesitaban estar en incubadoras y se acabó el oxígeno. Desesperadas enfermeras trataron de darles respiración manual. Fue inútil. Murieron varios bebés. Algún miserable pondrá alguna barbaridad o duda en sus comentarios. A ver si se atreve a preguntarle a la Sra. Kelly Yobana Rengifo Angulo lo que se siente al perder a mellizos que habían nacido prematuros y necesitaban respirar en una incubadora.

Estamos tolerando demasiado. El individuo que finge ser presidente de la República y su miserable ministro de Salud, nunca quisieron convocar equipos profesionales para manejar la crisis originada por esta pandemia. Optaron por refugiarse en su entorno encabezado por un gabinete ministerial de burócratas incapaces. El presidente Vizcarra nos sigue insultando con sus conferencias de prensa usando información tergiversada o falsa o efectista como la del día de hoy: en aparente acto justiciero hace exigencias a las clínicas pero no se ocupa de soluciones inmediatas que están al alcance. ¿Por qué no encara de ese modo “valiente” a las empresas que han generado el colapso del oxígeno?

¿Y el complaciente periodismo?

¿no se da cuenta que están encubriendo muertes? A viva voz investigaban hasta a un ladronzuelo de billeteras y ahora son silenciosos espectadores mientras repiten y repiten “quédate en casa”. ¿Eso es periodismo? ¿Qué les dirán a sus hijos mañana? ¿A ellos también les mentirán y no les contarán que guardaron silencio mientras morían recién nacidos y las madres se desesperaban y doblaban de dolor? ¿Están seguros los periodistas complacientes que mañana no necesitarán atención médica y que también les puede tocar? ¿Qué lleva al periodismo a encubrir tanto?

En nuestras narices están las evidencias de corrupción. Verán que en un tiempo, esperemos no lejano, Vizcarra y su corte encabezada por Zeballos y Zamora quedarán más al desnudo. Pero hoy ¿van a seguir impunes mientras mueren miles de peruanos y no por Covid-19?

Un inteligente amigo me hace notar que este gobierno “esperó” 100 días para darse cuenta de que el problema del oxígeno se iba a presentar. El primer día ya se sabía que el Covid-19 ataca los pulmones, bastaba un simple razonamiento para generar, desde el primer día, una producción mayor. ¿Por qué no lo hicieron? Que no se refugien en la ineptitud. La razón es evidente: el negociado. Si había mucho oxígeno el precio bajaba. Si se ponía fin al oligopolio fundado por Ugarte y continuado por Vizcarra, esas dos empresas pasaban a tener competencia y perdían el mercado porque no es complicado producir oxígeno: lo hizo en unos días un sacerdote en Iquitos. Reparemos en algo más. ¿Cuál es la solución que anunció el ministro de Salud Zamora? La importación de oxígeno. No la liberación del mercado para producir internamente sino la importación. Precios altos, comisiones, negocio. ¿Alguien quiere seguir creyendo que el gobierno de Vizcarra es honesto? Es más ruin que uno deshonesto: genera muertes.

Quien es Oscar Ugarte Ubilluz?

Nacio  en Pucallpa,realizó sus estudios de medicina en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos entre 1961 y 1968.  Maestría en Salud Pública de la Universidad Peruana Cayetano Heredia

Perteneció a Vanguardia Revolucionaria, como miembro del Comité Central, regidor de la Municipalidad de Lima , periodos 1984 a 1986 y 1987 a 1989,  encargado de los Programas de Salud, Vaso de Leche y Bienestar Social. Fue Viceministro de salud entre enero y diciembre de 2002, durante el gobierno de Alejandro Toledo.

Ugarte fue designado para el ministerio de salud por el Presidente del Consejo de Ministros  Yehude Simon, luego que el gabinete del primer ministro, Jorge Del Castillo, renunciara, Ugarte juró en el Palacio de Gobierno el 14 de octubre de 2008.​

Tras la crisis en el gabinete ministerial originada por el “Baguazo” y las muertes de policías y nativos amazónicos, el gabinete Yehude Simon Munaro renunció. Se  pensó que  Ugarte también renunciaría. Pero esto no aconteció, y fue ratificado en su puesto por el nuevo primer ministro, Javier Velásquez Quesquén.​ Ugarte volvió a jurar como ministro de salud el 11 de julio del 2009, en una ceremonia en el Palacio de Gobierno, presidida por el presidente Alan García Pérez.. Su  posición favorable hacia el aborto terapéutico, generó discrepancias en el gabinete con el  ministro de defensa de entonces, Rafael Rey.

 

España: 100 vuelos en primer día de apertura del espacio Schengen

El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, ha afirmado que España recibirá el Domingo 21, cien vuelos en el que será el primer día de apertura de las fronteras con el espacio Schengen y la Unión Europea.

Ábalos ha visitado junto al ministro de Sanidad, Salvador Illa, el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas para supervisar las medidas de seguridad puestas en marcha para la prevención del coronavirus, un día antes de que finalice el estado de alarma.

Para garantizar que los aeropuertos españoles «sean una puerta de acceso segura» al país, a partir de mañana los viajeros que lleguen a España tendrán que pasar tres filtros de seguridad.

El primero de estos filtros estará basado «en las declaraciones responsables» de los visitantes, donde se solicitará al viajero información sanitaria, y también aquella relacionada con su hospedaje en España o los lugares que visitará.

Un segundo filtro será de temperatura y el tercero, «visual».

Si algún visitante no supera alguno de estos controles «primarios», tal y como ha dicho el ministro de Sanidad, Salvador Illa, el viajero pasará a ser atendido por un médico de Sanidad Exterior que, según el diagnóstico, podrá derivar al paciente al servicio sanitario español.

Sanidad Exterior cuenta con 600 efectivos en toda España, de los que 150 son médicos y enfermeras.

Este personal, ha dicho Illa, se ha visto reforzado con 100 personas más, y se irán incrementado a la vez que España, a partir del 1 de julio, abra sus fronteras a países de fuera de la Unión Europea y del espacio Schengen.

Con la apertura de las fronteras, los vuelos que reciba España se irán ampliando «gradualmente», y aunque aumentarán, no será de forma significativa, ha añadido Ábalos.

Todas las medidas de seguridad que a partir de mañana se pondrá en marcha en los aeropuertos españoles han sido aprobadas por la Comisión Europea, a través de la Agencia Europea de Seguridad Aérea, y bajo la supervisión del Centro de Previsión de Enfermedades Europeo.

En la actualidad, las llegadas que recibe España son de terceros países, de una lista limitada. Los vuelos están justificados a situaciones como expatriaciones, por motivos de trabajo o de residencia.

En la comparecencia, el ministro de Sanidad ha sido preguntado por dos nuevos positivos de coronavirus registrados en Baleares que, según medios locales, habrían pasado a España después de superar los tres controles de seguridad de los aeropuertos.

Illa ha asegurado que, aunque no tenía información precisa al respecto, «la buena noticia» es que finalmente esos casos se detectan por los mecanismos de seguimiento puestos en marcha.

«Toda la información que pedimos que complementen los viajeros permiten hacer un seguimiento de los contactos estrechos y, por lo tanto, una detección muy precoz y una actuación rápida y contundente para controlarlos», ha asegurado.

Desde el pasado el 11 de mayo, se han registrado en España 34 brotes de coronavirus que han afectado a 962 personas. Hay nueve brotes activos, «todos bajo control», que afectan a 92 personas.

 

 

España: «Vamos a Salir» gran pacto por la reconstrucción

Nunca más recortes en sanidad. Ni  mercantilizar los cuidados»

Sesenta personalidades del mundo de la cultura, la ciencia, el arte, la universidad o el sindicalismo han suscrito un manifiesto bajo el lema Vamos a salir en el que reivindican un “gran pacto” para la reconstrucción social del país, basada en la defensa de los servicios públicos, y en el que también se pide abandonar “la confrontación y el odio” para lograrlo.

El texto Por un pacto para la reconstrucción social de España ha sido promovido por personalidades del mundo de la cultura como el cineasta Pedro Almodóvar, escritores como Almudena Grandes, Elvira Lindo, Rosa Montero, Antonio Muñoz Molina o Juan José Millás, poetas como Luis García Montero, Benjamín Prado o José Manuel Caballero Bonald, actores como Antonio de la Torre o Alberto San Juan y cantantes como Rozalén, Joaquín Sabina, Ana Belén y Víctor Manuel, Juan Manuel Serrat, Ismael Serrano o Marwan.

También figuran el filósofo Emilio Lledó, los líderes de CCOO y UGT, Unai Sordo y Pepe Álvarez, el catedrático Emilio Ontiveros, el ex rector de la Universidad Complutense de Madrid Carlos Berzosa, periodistas como Ignacio Escolar, Pepa Bueno y Jesús Maraña, así como profesores del CSIC y personalidades del ámbito científico.

                        Sabina , Almodovar y Serrat

En el manifiesto se pide a las fuerzas políticas, sociales y económicas un “gran pacto” para la reconstrucción social del país y se hace hincapié en la necesidad de no dejarse arrastrar por “la confrontación y el odio”.

“La crisis sanitaria y económica más intensa que hemos conocido en tiempos de paz no puede ser abordada desde la dialéctica de la guerra”

“Una apuesta por reforzar nuestros servicios públicos. Un país, que es el nuestro, y que necesita trabajar desde la concordia y alejarse de la crispación. Nada más. Y nada menos”, se destaca en el comunicado.

En esta línea, los promotores del texto recalcan que España logrará salir adelante “si no nos dejamos arrastrar por la confrontación y el odio” y defienden que “la crisis sanitaria y económica más intensa que hemos conocido en tiempos de paz” no puede ser abordada “desde la dialéctica de la guerra”.

“España ha sufrido y sufre, pero nuestro pueblo va a salir adelante. Lo va a hacer desde la reivindicación y el reconocimiento al mundo del trabajo. Ese que estuvo ahí cuando casi todo se detuvo para garantizar los suministros básicos de toda la población, a veces sin las medidas de protección sanitaria necesarias y poniendo en juego su propia integridad”, han señalado en su comunicado.

«Nunca más recortes en sanidad. Nunca más mercantilización de los cuidados»

En este sentido, en el texto se hace una férrea defensa de los servicios públicos, “que son la garantía para ejercer los derechos de ciudadanía en igualdad”. “Nuestro sistema sanitario, socio-sanitario y de cuidados ha mostrado el valor de sus profesionales, pero es el hecho de contar con un sistema público y universal suficientemente financiado lo que garantiza el acceso de toda la población a la salud y a los cuidados. Nunca más recortes en sanidad. Nunca más mercantilización de los cuidados”, defienden.

España: Sobre cómo afrontar la crisis constituyente

El desafío al que nos enfrentamos tiene características inquietantes: no se refiere a la nueva normalidad sino a la necesidad de instaurar un nuevo modelo de convivencia que garantice la solidez de la democracia

Juan Luis Cebrían

La semana pasada Juan Carlos Campo, ministro de Justicia, dijo en el Parlamento que nos encontramos ante una crisis constituyente. Es efectivamente lo que sucede, aunque no solo en nuestro país, y se debe sobre todo al estupor y el miedo que provoca la globalización, sentimientos magnificados ahora por la pandemia.

Campo dijo «constituyente» y no constitucional. No creo que se equivocara aunque luego alguien de su departamento hizo pública una necia rectificación. Es constituyente y es global porque enfrenta las dificultades del sistema representativo para hacer frente a la actual perturbación del orden emanado de la II Gran Guerra. Comentaristas de la derecha ponen el grito en el cielo relacionando su discurso con la mascarada del independentismo catalán. Pero el desafío al que nos enfrentamos tiene características todavía más inquietantes: se refiere a la necesidad de instaurar un nuevo modelo de convivencia que garantice la solidez de la democracia. No es la estúpida nueva normalidad, sino el mundo del inmediato futuro lo que hay que construir.

La destrucción del orden representativo tiene que ver con el desplazamiento de los centros de poder y el agotamiento de las estructuras políticas y mediáticas que vertebraban la toma de decisiones. Los tumultos contra la brutalidad policial que ahora sacuden la conciencia norteamericana responden a una pulsión idéntica a la de los movimientos tipo Occupy Wall Street, 15-M, primavera árabe o incluso Me Too. Es la protesta frente a un sistema que se percibe injusto tanto para el interés colectivo como para las expectativas individuales, y en la que el espacio de lo social irrumpe y alborota el propio espacio político. Habíamos vivido algo parecido en Mayo del 68, pero entonces no había Internet ni redes sociales como las de ahora; persistía el telón de acero; no se había consumado el proceso descolonizador y apenas comenzaba la globalización de la economía financiera. Por si fueran pocas estas diferencias, la población mundial era menos de la mitad de lo que es hoy.

En situación como la actual un Gobierno verdaderamente progresista debería propiciar más el debate intelectual que los eslóganes y pasquines a que nos tiene acostumbrados. A Pablo Iglesias hay que reconocerle que ha teorizado en numerosas ocasiones sobre estos temas. Siempre me ha parecido que, aunque su diagnóstico es relativamente acertado, sus propuestas de solución resultan erróneas. Encaramado al populismo y acosado por contradicciones personales, temo que esté echando a perder su vocación intelectual sin que logre en cambio asaltar los cielos. Podemos tiene en cualquier caso un proyecto para España, que ya se ensayó en Venezuela y Bolivia con los lamentables resultados que conocemos. El problema es que el Partido Socialista Obrero Español no tiene proyecto alguno, o por mejor decir tiene una variedad de ellos, siempre que el que se aplique garantice el poder a su actual líder. Algunos ven en esto una dificultad, pero la experiencia demuestra que puede convertirse en una coyuntura favorable para el pacto.

Como respuesta a la crisis constituyente en el imaginario de Podemos se inscribe la clausura del régimen de 1978 y la apertura de un proceso del mismo género que acabe con la Monarquía. Estudioso de Negri y Hardt, profetas del libertarismo global, Iglesias no cree en la autonomía de la política respecto a lo social y posiblemente piensa que ocupar el poder constituyente equivale al triunfo de la revolución misma. Con un programa así es difícil mantener la coherencia en un equipo de gobierno desnortado por la incidencia sanitaria, contra la que ha luchado manteniendo al frente a un señor bastante bobo. La ciencia epidemiológica, si existe tal cosa, no saldrá bien parada de esas comparecencias en las que los políticos se escudan en los expertos y los expertos en los políticos. Pero la obligación de los que mandan, además de salvar vidas como dicen, es liderar la reconstrucción o, por mejor decir, construir el nuevo orden. El económico desde luego; el moral y político también. Nada de eso se puede ni se debe hacer con el apoyo de solo una mitad del arco parlamentario, ni tampoco desde el cortoplacismo de quienes están dispuestos a pagar cualquier precio para derribar al Gobierno o para mantenerse en él. La crisis constituyente no es fruto del coronavirus sino del desprestigio de las instituciones y de quienes las encarnan. Es una tontería decir que ahora no es el momento de afrontarla. ¿Cuándo entonces? Pero no se puede hacer con un Gobierno de la señorita Pepis. Se necesita un equipo que sepa mirar la realidad e interpretarla, y no busque de continuo el sonrojante aplauso de un conjunto de diputados empachados de ideología.

No son necesarias nuevas coaliciones ni romper la que existe sino buscar una mesa de diálogo sincero en la que las pasiones y la ignorancia den paso al acuerdo. La única medida verdaderamente consensuada desde que comenzó el drama ha sido la instauración de la renta mínima vital, que no es necesariamente una seña de identidad progresista. Hasta Trump sugiere entregar un cheque de mil dólares a cada americano adulto. Un Gobierno de progreso ha de atender al signo de los tiempos y ajustar el funcionamiento de las instituciones a las demandas de la ciudadanía. Abordar el desafío de la mayor recesión mundial de la historia en las condiciones en las que Sánchez y Casado tratan de imponernos supone una falta de lealtad a sus votantes, por más que con ello halaguen a la militancia. El cinismo insolidario destilado por los dirigentes de los dos principales partidos contrasta con la eficacia de la única comisión de reconstrucción verdaderamente útil, integrada por sindicatos y empresarios, pese a que su funcionamiento haya sido boicoteado desde La Moncloa. Cuando la sociedad civil brega por encontrar soluciones pactadas el poder político las canibaliza en busca de réditos electorales.

Las fuerzas de izquierda, fragmentadas y unidas solo por su antagonismo con la oposición, tienen ante sí una encrucijada histórica. Mientras sus portavoces se comporten en Cortes como si de una asamblea de facultad se tratara, los exabruptos y desplantes verbales seguirán abonando la fortaleza de la reacción conservadora. Si el socialismo español, huérfano de todo análisis teórico, persiste en sustituir el liderazgo por una camarilla clientelista dispensadora de favores, acabará el país en manos de la extrema derecha. Las famosas dos almas históricas del PSOE, las de Prieto y Largo Caballero, no son una exclusiva de ese partido. En España, los puristas del marxismo postularon la revolución para acabar colaborando con la dictadura. A los pragmáticos socialdemócratas se debe en cambio el impulso reformista que logró reconstruir Europa en alianza con la democracia cristiana tras la guerra. El mismo que permitió la larga etapa de cambios y consolidación democrática presidida por Felipe González.

Rodriguez Zapatero y Nicolas Maduro en uno de sus múltiples encuentros

La debilidad del actual equipo socialista no se debe solo a su penuria de escaños ni a su irregular pacto con Podemos y los independentistas, sino sobre todo al descalabro interno del partido que comenzó con la obsesión de Rodríguez Zapatero por eliminar cualquier vestigio del llamado felipismo. La pandemia ha sido en ciertos aspectos una bendición para Sánchez, que ha evitado tener que explicar entre otras cosas el amigable encuentro del ministro Ábalos con la vicepresidenta venezolana, programado y no fortuito como se quiso hacer creer. Hay quien piensa que el Gobierno es rehén de Venezuela debido a la presencia de Podemos, pero la mayor amenaza que puede esgrimir Caracas es desvelar la naturaleza oculta de las gestiones de Zapatero con Maduro o el origen de los millones de dólares depositados en Suiza por su antiguo embajador.

 

Contra los que piensan que la pandemia marcará la derrota de la globalización, esta acabará imponiéndose tecnológica y humanamente. Al margen los refuerzos que en el corto plazo recaben los Estados, necesitamos construir una gobernanza mundial más eficiente y fiable que el sistema de Naciones Unidas. Si el partido socialista y la derecha moderada no son capaces de volver a ser fuerzas dominantes del cambio y garantía del funcionamiento de la democracia, no habrá otro camino para la estabilidad política. España volverá entonces a ser un país prescindible en el diseño de la gobernanza global.

Covid 19: Muertes superan las 400.000 crecen en Brasil e India

Las muertes en el mundo por el nuevo coronavirus superaron las 400.000 el domingo, cuando el número de casos está aumentando en Brasil e India, según un recuento de cifras ultimo.

Estados Unidos es responsable de alrededor de la cuarta parte de todas las muertes, pero los fallecimientos en América del Sur crecen rápidamente.

La cruz marca una tumba, en Río de Janeiro- Brasil, país con más muertes en Sudamérica, su situación sanitaria amenaza a sus vecinos Argentina, Uruguay, Paraguay, Bolivia, Perú, Colombia, Venezuela…

El número de muertes relacionadas con COVID-19 en sólo cinco meses es ahora igual al número de personas que mueren anualmente de malaria, una de las enfermedades infecciosas más mortales del mundo.

Los casos globales se acercan a los 7 millones, con cerca de 2 millones, o el 30%, de ellos en Estados Unidos. América Latina tiene el 15% de los casos, según el recuento de Reuters.

La primera muerte por COVID-19 fue reportada el 10 de enero en Wuhan, China, pero fue a principios de abril cuando el número de muertos pasó de 100.000, según el recuento de Reuters de los informes oficiales de los gobiernos. Tomó 24 días el alza de 300.000 a 400.000 decesos.

Estados Unidos tienen el mayor número de fallecimientos en el mundo con casi 110.000. La mortalidad en Brasil está aumentando rápidamente y podría superar a Reino Unido, para tener la segunda mayor cantidad de decesos.

Se cree que el total de muertes es superior a las 400.000 oficialmente comunicadas, ya que muchos países carecen de suministros para realizar pruebas a todas las víctimas y algunos países no cuentan las que ocurren fuera de un hospital.

Lisa Shumaker -J. López

 

Gráfico de seguimiento del Covid 19 en el mundo:   https://reut.rs/2UpTAh3

Rafael Nadal: Lo ideal es que los que deciden deberían ser «los mejores

Rafa Nadal (Manacor, Mallorca, 1986), para muchos simplemente el mejor deportista español de la historia, opina que el futuro tiene que ser ni más ni menos como el pasado: “Me imagino las pistas y los estadios llenos, que es como me gusta verlos. Hay que ser pacientes y encontrar la medicina, pero yo no creo en eso de buscar una nueva normalidad. La nueva normalidad será la que nosotros aceptemos. A mí me gusta ver gente, abrazarme con la gente, compartir con la gente…, y tenemos que buscar esto otra vez. No podemos conformarnos solo con cumplir eternamente medidas de distanciamiento”, comenta por teléfono desde su casa en Mallorca.

              Rafa Nadal Tenista

Uno de los problemas específicos provocados por esta crisis que han impactado en el mundo del tenis es el de la interrupción abrupta de todo el circuito profesional y la subsiguiente situación de los jugadores alejados del Top-100. Una ‘operación socorro’ fue puesta en marcha por los que sí están en lo alto del escalafón: “Yo formo parte del Consejo de Jugadores y creo que tenemos una responsabilidad para intentar ayudar a que el deporte prevalezca de la mejor manera posible», explica Nadal. «Se han tomado diferentes medidas, y una de ellas es la de crear un fondo para que los cien mejores jugadores del mundo aporten una cantidad de dinero para poder ayudar al resto de jugadores, que lo están pasando mal y están viviendo situaciones difíciles, y a muchos trabajadores de la ATP. Se trata de un fondo para ayudar al mundo del tenis en general, no sólo a jugadores. En los momentos difíciles estás obligado a pensar en el que está peor que tú». Al final, cinco millones y medio de euros fueron recaudados para ayudar a un total de 800 tenistas profesionales (400 hombres y 400 mujeres).

Nadal está preocupado. También enfadado. “Viene un futuro muy complicado y vamos a necesitar de la experiencia de los mejores para salir de esta”, explica. “Tengo las opiniones muy claras, pero desgraciadamente no puedo pronunciarme sobre si las cosas se están haciendo bien, muy bien, mal o fatal, porque la realidad es que lo que yo diga al final se toma como un tema político. Estamos en un momento tan sensible que todo se politiza. ¡A mí qué más me da si lo hace bien Vox, el PP, Podemos, el PSOE, Ciudadanos o el que sea! Me da igual Casado, Abascal, Arrimadas, Iglesias o Sánchez. Que nos saquen de esta y que tengamos el menos número de muertes posible y el menor impacto económico posible. Pero hay un problema en la política, y es que los que toman decisiones, desgraciadamente, siempre lo hacen pensando que hay nuevas elecciones. En un mundo ideal sería muy positivo que, en una situación así, los que tomaran las decisiones fueran los mejores en cada ámbito y sin ninguna aspiración política”.